martes, 24 de marzo de 2015

Alejandro Arestegui: “Más que el cine, el teatro o la televisión, lo que me apasiona es el proyecto que hay detrás de cada uno”

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Alejandro Arestegui es el encargado de dar vida a Tom, personaje de la obra de teatro El Zoo de Cristal, del autor Tennesse Williams. Tom es el hijo ambicioso que se debate entre el deber de cuidar a su familia y el deseo de salir al mundo, que alimenta yendo al cine y soñando con las vidas de los personajes de las películas. Esta obra, que está obteniendo todo el calor del público por cada escenario que pasa, se podrá disfrutar en el Teatro Principal de Palencia este jueves 26 a las 20,30 horas y continuará de gira por diferentes puntos de la geografía española durante los próximos meses.

Beatriz Santos: Han actuado con esta obra en el Teatro Fernán Gómez de Madrid y desde diciembre están de gira por España. Tras estos meses de representación, ¿cómo ha sido la acogida del público con la obra El Zoo de Cristal?

Alejandro Arestegui: La verdad es que muy buena. La gira está siendo muy grande, la están programando mucho y normalmente el teatro suele estar lleno. En las últimas funciones en los teatros El Escorial de Madrid y Liceo de Salamanca el aforo ha estado hasta arriba. Además, yo creo que la gente sale encantada. Normalmente no tenemos muchos comentarios negativos así que todo es positivo en esta función.

B. S: En principio la gira está programada hasta mayo, ¿se tiene previsto ampliarla teniendo en cuenta el éxito que está teniendo?

A. A: Justo nos han confirmado esta semana que la han vuelto a contratar para entrar en los meses de junio y julio en el Teatro Bellas Artes de Madrid. La previsión es volver a entrar en Madrid porque en julio todavía hay bolos y nos acaban de mandar también una lista con fechas hasta diciembre de 2015 con posibilidad de ampliar si se sigue demandando tanto por los programadores, como por el público. La obra está teniendo muy buena acogida.

B. S: ¿Cómo definiría a Tom, su personaje en esta obra?

Cuando me puse a trabajar en el personaje, al saber que era la obra más autobiográfica de Tennesse Williams leí biografías de él antes deponerme con otras obras. La primera que leí fue una biografía publicada en los años 80 y una vez que conocí un poco su vida ya comencé a leer muchas de sus funciones. Este dramaturgo tiene muchas obras publicadas, incluso relatos cortos y en casi todas ellas se ven referencias a muchos capítulos de su vida, pero en especial, en El Zoo de Cristal. En esta obra lo que existe es más una necesidad de expresar un sentimiento de culpa que Williams tenía. Cuando él se fue de casa su madre hizo que ingresaran a su hermana en un psiquiátrico porque tenía problemas y le hicieron una lobotomía. Él siempre cuenta que se sintió muy culpable por ello. De esa necesidad autobiográfica y de expresar un sentimiento de culpa por haber abandonado a su hermana nace El zoo de cristal. Aunque es su obra más autobiográfica hay cambios en algunos datos, creo que por suavizar o por respeto.

B. S: Cuando tiene que interpretar un papel, un personaje, ¿cómo es esa preparación?

A. A: Para mí cada personaje tiene una preparación diferente. En el caso de El Zoo de Cristal como mi personaje es Tennesse Williams (Tom), en el momento que vi que era autobiográfico y que contaba un poco su vida lo que hice fue investigar. Al ser un personaje público había mucho escrito, hasta una biografía muy buena, entonces en este caso si pude leer mucho sobre él para construir a Tom. Leí mucho sus obras que tienen algo que ver con su vida y la poética que tiene, vi muchas películas hechas de obras de Tennessee Williams. De El zoo de cristal es de lo que menos quise ver para no influenciarme, he visto después de haber estrenado la obra. Además de leerme sus obras, como muchas de ellas tienen versión en cine, me empapé de las películas para ver un poco como era su mundo. En este caso había mucha información. Otras veces te puede tocar un personaje en el que tienes que recurrir a otros sitios para buscar información. Por suerte en este había mucho tanto escrito, como en internet. He tenido fácil el estudio, luego interpretarlo es diferente (risas).

B. S: Ha trabajado como actor de teatro, de cine y de televisión. ¿Qué mundillo le apasiona más de los tres?

A. A: Yo entré en la escuela de arte drámatico y ya había hecho teatro en el colegio, pero yo siempre he sido muy fan del cine. En mi casa no había pasión por el fútbol como en casi todas las casas españolas y recuerdo que mi padre compró un video cuando yo era pequeño, creo que de los primeros que hubo en Avilés. Desde siempre he tenido mucha influencia con el cine, he visto muchísimo y creo que mi pasión arranca de ahí. Con el tiempo, una vez que empecé a trabajar sobre todo en teatro, me he dado cuenta que más que un código y la manera de trabajar que tienen la televisión, el teatro y el cine, lo que me apasiona, es el proyecto. Es decir, el texto, los compañeros, el personaje, el director…Siempre que puedo elijo el proyecto. De repente uno de teatro me puede gustar menos y uno de cine con un director y un personaje estupendo me apasiona más, o al contrario.


B. S: ¿Es importante, a la hora de trabajar, la relación con los compañeros?

A. A: Importantísima. A veces trabajas con compañeros que no habías tenido antes la oportunidad y tienes una química con ellos brutal. Otras veces trabajas con alguien que ya conoces y sabes que te entiendes bien, que tienes química, que va a ser fácil desde un inicio y eso son siempre puntos a favor. También hay casos en los que te toca trabajar con actores a los que admiras. Recuerdo que en una de mis primeras obras hacía de mi padre Emilio Gutiérrez Caba, que era un actor al que yo había visto antes en muchas películas y del cual era fan. Cuando me llamaron para hacer un proyecto con él, en el que hacía de mi padre y tenía casi todas las escenas con él fue algo muy emocionante.

B. S: Cuando le toca trabajar con alguien que no tiene tanto ‘feeling’, ¿cómo se lleva?

A. A: (risas) Es muy delicado gestionar eso. Intentas tirar, sobre todo cuando pasan los años, de técnica o de oficio. Buscas todas las armas para que el proyecto salga adelante. A veces encuentras a alguien con el que no tienes tanta química pero bueno, muchas veces eso acaba rompiéndose y luego si se la encuentras.

B. S: También ha desempeñado la faceta de director, si tuviera que elegir entre actuar o dirigir, ¿por cuál se decantaría?

A. A: Actuar. Casi todo lo que he dirigido ha sido porque me lo han propuesto. Es verdad que me gusta y cada vez más porque no deja de tener un vínculo con mi profesión y disfruto bastante con ello. Empecé como ayudante de dirección porque me lo ofrecieron, era trabajo y me venía muy bien, pero ha sido algo casual que yo no he buscado. Nunca ha habido un proyecto por el que yo haya peleado para dirigir. Mi pasión es la actuación y a ella le debo el dirigir.

B. S. La cultura española soporta el IVA más alto de toda Europa, como profesional que le afecta de forma directa, ¿qué opina al respecto?

A. A: El 21% no afecta sólo al público cuando va a pagar una entrada, sino que también lo hace directamente al empresario. Cuando éste tiene que pagar un 21% tiene un margen de beneficio más pequeño y eso repercute en los sueldos, en el tipo de proyectos que se hacen y va todo en cadena. Teniendo en cuanta las cifras del IVA cultural en otros países de la Unión Europea es verdad que en España es desmesurado. Por esta razón haya tantas protestas desde los actores, asociaciones de empresarios e incluso la misma política se replantea la bajada o juega con ello. Cuando pasa esto es porque hay un problema y lo saben. Esto afecta directamente a la cultura, no sólo desde el punto de vista del espectador, sino también del empresarial.

B. S. ¿Qué proyectos tiene en mente?

A. A: De momento la gira de El Zoo de Cristal hasta diciembre, con posibilidad de continuar y también estoy pendiente de que me confirmen una película para grabar a finales de año.

Beatriz Santos (_@BeaSantos_)

Marta Solano: “En los medios locales es donde realmente te formas”

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Es una de las caras más conocidas de Televisión Española, la periodista Marta Solano, es capaz de transmitir a través del teléfono la misma sensación de cercanía que cuando la vemos en pantalla. Puede presumir de haber sido imagen de los Juegos Olímpicos de Londres y siempre está dispuesta a afrontar cualquier reto que le depare su profesión. Curiosa, natural, inquieta son algunos de los adjetivos que definen a esta madrileña que empezó su andadura como profesional de la comunicación de TVE hace una década y cuya pasión es, sin duda, comunicar.


Foto: Formula TV
Beatriz Santos: ¿Qué le motivó para trabajar en este campo profesional?
Marta Solano: Echando la vista atrás, ahora pienso que es la única profesión en la que me veo realmente y que tiene mucho que ver conmigo. Me gusta la gente, me gusta comunicar, soy muy inquieta y curiosa, pero después de selectividad llegué a pensar en hacer psicología, carrera que no tiene nada que ver conmigo porque soy más de hablar que de escuchar, y estuve a nada de no hacer periodismo. Creo que he acertado con esta profesión y, en concreto, el periodismo deportivo al que le he dedicado gran parte de mi trabajo fue un poco por casualidad, no algo vocacional. A mí me gusta mucho practicar deporte y al ser una persona joven, risueña, mi manera de comunicar y mi naturalidad vieron que tenía buena imagen para el tema de deportes. El periodismo deportivo, en especial en televisión, es una gran escuela y te da muchas oportunidades que en otras secciones como nacional o internacional a la gente joven no le suelen dar. En este campo coges muchas tablas a la hora de viajar, de presentar, de hacer imagen, de entrevistar y de verte en situaciones comprometidas. Al final como se aprende es haciendo, tocando y estando sobre el terreno.

B. S: ¿Recuerda cómo fueron sus inicios en los medios de comunicación?
M. S: Sí, yo jugaba al baloncesto y empecé a hacer mis pinitos un poco tarde. Estudié en la Complutense y ahí realmente la parte práctica se tocaba poco. Mis compañeros durante el año o en verano estaban en emisoras, radios o periódicos locales y por ello me entró el agobio al ver que, en tercero, yo no había empezado. Dejé el baloncesto que era mi pasión y a lo que dedicaba mucho tiempo, básicamente estudiaba y  jugaba, y empecé con un mini currículum ridículo por mi barrio en prensa escrita, en una revista local, donde conocí a una chica que trabajaba en una emisora en Las Rozas y gracias a la cual lo probé y me encantó. Pensaba que me iba a dedicar a la radio porque también estuve en Cadena Ser y Radio Fórmula. En el último año de carrera, estando en la Cadena Ser, me quedaba una asignatura para julio y me dijeron que no aprobara el examen porque si no, no me iban a renovar la beca. En ese momento dije que iba a hacer las cosas bien, a poner todo mi esfuerzo para aprobar ese examen,  licenciarme en julio que era cuando tocaba y no dejar de hacerlo por ningún contrato. Cuando acabó la beca en la radio me ofrecieron ir a la televisión, a Localia, y ahí fueron mis primeros pasos en televisión. En los medios locales, ya sea prensa, radio o televisión es donde realmente te formas. Cuando llega la oportunidad en un medio de primera línea que te pide locutar una noticia o redactar un texto, lo importante son las tablas que has cogido antes en esos medios más pequeños, que para mí son un aprendizaje fundamental, porque en el fondo no hay gran diferencia entre ellos.

B. S: De su experiencia como periodista deportiva tendrá muchas vivencias y recuerdos, ¿con qué se quedaría?
M. S: Te diría tres momentos. El primero cuando aterricé en deportes. Yo estaba en nacional y tras seis meses sin hacer nada,  porque es una sección donde no dan mucha confianza a la gente joven recién llegada dado que los temas que se tratan son importantes, pedí el cambio a deportes en el telediario. A los pocos días abrí el noticiario con un directo de la Selección Española, a la semana estaba con Carlos Sainz en el Sahara porque se iba al Dakar a presentar el Touareg de Volkswagen y fue increíble, al mes me fui a los Premios Príncipe de Asturias con Fernando Alonso y, a los tres meses, estaba presentando telediarios. Ese comienzo y esa confianza que depositaron en mí nunca la voy a olvidar. Otro momento importante en mi carrera fue cuando di el salto de presentar telediarios a presentar programas deportivos y retransmisiones. Ese fue otro reto profesional. Por último, el que recuerdo con más cariño y un poco cumbre de mi carrera como periodista deportiva fue ser imagen de los Juegos Olímpicos de Londres en el año 2012 por todo lo que aprendí y porque supuso la culminación de un sueño. Yo quería seguir en deportes hasta vivir al menos unos Juegos Olímpicos, iba a ir a los de Pekín 2010, pero una semana antes me fracturé el sacro trabajando y por eso los de Londres eran por honor y algo que quería, además de lo que me supuso después profesionalmente. Para mí esa experiencia fue el momento más bonito.

B. S: Tras tu etapa como periodista deportiva llega la de presentar el programa España Directo, ¿cómo enriquece a un profesional de la comunicación un formato televisivo de estas características?
M. S: Muchísimo. El cambio para mí, más que hacer un programa en directo diario de dos horas, porque ya venía de hacer mucho en deportes y estaba acostumbrada, fue tratar otro tipo de informaciones más amargas, como la crónica negra, en las que tienes que tener una delicadeza especial. Me costó el cambio de registro porque venía de una información más amena, más agradable y no emocionarse en directo es difícil. Por otro lado, por primera vez iba a presentar sola durante dos horas y era una gran responsabilidad. La verdad es que el directo, comunicar y los retos para mí son un premio. He aprendido muchísimo en cambios de registro. De estar hablando de un suceso, a hacerlo de un temporal o pasar de repente a una sección de cocina. Además, muchas veces hacíamos el programa sobre la marcha porque de la reunión inicial o las previsiones del día anterior, puedo decir que casi la mitad de los días sonaba la cabecera del programa y no llegaban las imágenes por problemas técnicos, se había cambiado el tema a última hora o teníamos directo y se había levantado por completo toda la escaleta. A mí esos días son los que más me gustan, a mí y creo que a todo periodista.

B. S: ¿Cómo cree que internet ha cambiado la forma de hacer periodismo?
M. S: Muchísimo, hasta el punto de que, por ejemplo, muchas veces en función de lo que es trending topic o no, se puede incluso marcar la agenda informativa. Antes a lo mejor pasaban desapercibidos algunos datos, anécdotas o meteduras de pata y ahora enseguida se convierte en tendencia y un medio de comunicación a veces se ve obligado a mencionarlo o hablar sobre ello. También, a la hora de interactuar, no sólo como agenda del día, sino a la hora de un protagonista. Yo me hice Twitter porque estaba en Estudio Estadio y me di cuenta de que muchas informaciones llegaban antes, o directamente, sólo por las redes sociales. Si no tienes esas herramientas estás como en otro mundo y son realmente necesarias. Además sirven para interactuar con la gente, lo estamos viendo en todos los programas con el uso de los hashtags para que el público participe e incluso en las audiencias, por ejemplo en televisión, no se mira sólo la de los espectadores que es la tradicional, también se tiene en cuenta la de las redes sociales. El que viva un poco al margen de todo esto es como si no estuviera en el mundo, son plataformas de comunicación necesarias para un periodista. Asimismo, para conseguir una entrevista o para que contacten contigo para un trabajo, a la hora de campañas de publicidad o para presentar galas te contratan en función de los seguidores que tengas. A mí hay mucha gente que me contacta por Twitter. Ahora también tengo un blog, intento estar al día, pero es mucho más trabajo para los periodistas porque cada vez somos menos y tenemos que estar en todos los frentes. Es complicado.

B. S: Comenzó en Televisión Española en el 2005, ¿cómo ha evolucionado durante esta década la cadena?
M. S: Ha cambiado radicalmente. Al poco de llegar yo hubo un ERE y se fue la mitad de la plantilla, todos los veteranos de la casa. En 2007 sacaron oposiciones y yo aprobé una, soy personal fijo de Televisión Española y por ejemplo, a nivel laboral, a la gente que entramos con esa oposición nos bajaron el sueldo y dos o tres categorías. Por otro lado, a nivel de condiciones laborales a cambiado a peor, por desgracia, como en la mayoría de las empresas. Se ha perdido personal muy valioso con mucha experiencia y los más jóvenes no estamos en las condiciones laborales de antes. A nivel de trabajo, al poco de llegar yo, comenzó la digitalización que agiliza mucho el proceso, se pierde calidad porque aunque te den un curso para montar vídeos en el ordenador tú no eres un profesional de montaje que controle todo, pero es la manera de trabajar más barata y más rápida que ya se utilizaba en otros medios de comunicación. En TVE donde sobre todo lo hemos notado y nos ha hecho mucho daño ha sido que nos quitaran la publicidad porque nos ha restado independencia y libertad al medio de comunicación. Además, ahora en época de crisis, el presupuesto pactado inicialmente se ha reducido mucho y eso nos limita a la hora de viajar, de renovar derechos de productos como la Champions que la perdemos ahora en mayo, de perder series de éxito que se han ido a otras cadenas, en definitiva, de ser menos competitivos. Yo sigo pensando que Televisión Española tiene los mejores profesionales, pero cada vez tenemos menos medios e independencia económica para poder competir y ofrecer productos de calidad. Desde luego no es la edad de oro de este medio de comunicación, pero los que estamos dentro luchamos cada día por el objetivo de ser una cadena de servicio público.

B. S: Con esta situación, ¿no se ha planteado la idea de volver a incluir publicidad?
M. S: Los trabajadores lo pedimos porque sabemos el daño que ha hecho, pero no depende de nosotros. Hay muchos intereses, hay cadenas que se han quedado con la parcela publicitaria que antes teníamos nosotros y no les interesa puesto que siempre es mejor tener un rival más débil en el mercado y más en esta carrera que es tan competitiva y tan feroz. No nos lo van a poner fácil para que volvamos a tener publicidad, pero creo que es la única solución y viabilidad para que esta empresa sea un medio independiente, libre y competitivo. Necesitamos tener autonomía económica.

B. S: Aunque la tecnología haya cambiado la forma de hacer periodismo, ¿cuáles son para usted los principios de la profesión que no deberían cambiar nunca?
M. S: Sobre todo el contrastar las fuentes, que es algo que no se hace, y el hacer periodismo de calle. Como ahora todo va tan rápido y la información fluye de una manera vertiginosa y es más directa, tanto a nivel periodístico, como a nivel de fuentes y del ciudadano, nos metemos mucha presión y se cometen graves errores por ello. Hay que tener mucho cuidado porque si un medio de comunicación, por las prisas, no contrasta las fuentes y mete la pata en ese sentido, eso perjudica a la profesión. Es muy difícil tener exclusivas, ser independiente, diferenciarse de los demás, pero creo que ahora es más importante que nunca la deontología, la ética profesional, el contrastar las fuentes y saber que no vale todo. Al final es la esencia, pero por el nivel ritmo de trabajo muchas veces lo pasamos por alto.

B. S: Como periodista que ha pasado por la misma situación ¿Qué consejo le daría a las nuevas generaciones que se están formando para ser futuros profesionales de la comunicación?
M. S: Lo primero que no pierdan la ilusión, trabajando se puede, pero hay que esforzarse mucho y nadie te va a regalar nada. Te vas a encontrar gente que tiene padrinos y lo va a tener más fácil, se puede llegar sin ellos, yo no tengo y he llegado, no sé si cerca o lejos, pero al menos me gano la vida como periodista y estoy donde quiero estar. Me da mucha pena a veces cuando hablas con gente joven y parece que les preocupa más la presencia que realmente estar formado. Yo creo que no hay que correr tanto, hay que estar preparado de verdad y muchas veces, aunque no lo valoremos, la fase de formación y las prácticas en medios locales son muy importantes. Yo no me considero mucho mejor profesional que cuando tenía 25 años, estaba en una radio local y me escuchaban cuatro personas, ahí fue donde me forjé como periodista. El 90% de lo que soy ahora no ha variado mucho de lo que era entonces. Ilusión, formación y tomaréis el testigo, yo confío mucho en vosotros y aunque la cosa no está fácil es una profesión muy bonita, hay un país que informar y hay que hacer las cosas bien.

B. S: Actualmente sigue en Televisión Española, ¿en qué proyectos está trabajando?
M. S: Voy a empezar en abril un programa de seguridad vial, que se llama Seguridad Vital, que se va a emitir los sábados en la uno y empezaremos a grabarlo después de Semana Santa. Es un año complicado con el tema electoral y vamos a ver qué pasa con las parrillas. Hemos tenido cambios de jefes dentro de Televisión Española y ha habido momentos convulsos de inestabilidad y todos los proyectos están cogidos un poco con pinzas, a lo mejor lo que ahora es un proyecto en unos meses se decide que no y depende mucho de la financiación. Ahora es una nueva etapa, no estoy en deportes ni en informativos, estoy en programas en Prado del Rey y mi objetivo ahora es desencasillarme de mi imagen de periodista deportiva y tocar otros palos. Hay muchos proyectos en mente, pero ya veremos cuáles se concretan.

B. S: El periodismo es una profesión en muchos casos sin horario fijo y que requiere mucha dedicación, ¿cómo se combina la vida personal y la profesional?
M. S: Es muy difícil. Como es una profesión tan bonita, tan vocacional, te atrapa tanto que muchas veces no te das cuenta que dejas de lado tu vida personal, tu vida familiar e incluso a ti misma. Cuando empiezas a trabajar y ves que cuentan contigo para diferentes programas o eventos lo ves como una oportunidad y al final pasan los años y te pasa factura. Si el 90-99% de tu tiempo lo dedicas al trabajo tienes descuidada otra parcela importante de tu vida. Si quieres estar en primera línea es complicado mantener el equilibrio entre lo profesional y lo personal. En mi caso, tengo un niño pequeño y ahora estoy en un momento en el que quiero frenar un poco lo laboral para disfrutar de mi vida personal. Se paga el precio que tú quieras, hay gente que lleva una vida más tranquila y si tienen tiempo para ellos. Normalmente, para los que están en primera línea, es complicado conciliarlo. 

Beatriz Santos (@_BeaSantos_)

lunes, 9 de marzo de 2015

España se mueve

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El programa ‘España se mueve’ promovido por la Fundación Deporte Joven del Consejo Superior de Deportes llegó a Palencia de la mano del Ayuntamiento de la localidad y el Centro Supera La Lanera. En el parque ‘El Salón’ se delimitaron tres zonas para realizar esta actividad.

La parte central estuvo dedicada a body combat, body balance y zumba familiar.

Otra zona se destinó a entrenamiento personal y talleres específicos como estiramientos o abdominales y el tercer espacio se habilitó para los más pequeños.

La finalidad de esta iniciativa es acercar a la población la práctica de la actividad física además de que todos los ciudadanos conozcan los beneficios del ejercicio.

Beatriz Santos (@_beasantos_)

martes, 3 de marzo de 2015

Manifiesto por la igualdad de género

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Con motivo del Día Internacional de la Mujer, el pasado domingo, tuvo lugar en la Plaza Mayor de Palencia la lectura de un manifiesto acordado entre los Consejos Municipal y Provincial. 

Una representante del Consejo de la Juventud, Paula Antón, y una integrante del Programa Clara, Blanca Martínez, fueron las encargadas de dar voz a este texto reivindicativo a favor de la mujer en presencia de varias decenas de personas que se acercaron al lugar.

Con esta lectura se denunció la desigualdad que aún existe en áreas como la salud, el trabajo doméstico o el empleo, dato que a su vez desemboca en “una injusticia que afecta a la sociedad y la impide avanzar en el camino de la igualdad y el bienestar común que queremos de convivencia”, expresaron las portavoces. Paula Antón y Blanca Martínez destacaron que “en el mundo laboral la brecha salarial entre mujeres y hombres se sitúa en el 24%, la más alta de los últimos cinco años”. Además, a esta situación, “hay que añadir que a las mujeres la sociedad nos sigue dando el papel de las tareas del hogar y el cuidado de los niños”. Por ello, las ponentes quisieron pedir “la igualdad de género para conciliar la vida laboral y profesional” y asimismo, “desarrollar políticas, conseguir una mejoría en las empresas y que se realice una educación cívica de igualdad entre mujeres y hombres”.

Para finalizar la lectura se incluyó una cita de Martin Luther King: “Tengo un sueño, un solo sueño, seguir soñando. Soñar con la libertad, soñar con la justicia, soñar con la igualdad y ojalá ya no tuviera necesidad de soñarlas” y se agregó que “hagamos que la igualdad no se quede en un sueño, que se convierta en una realidad”. El evento concluyó con una suelta de globos rosas. 


Foto: Beatriz Santos

Beatriz Santos (@_BeaSantos_)